Cuando vives tan lejos de la gente que quieres, de tus amigos, al principio piensas que te acostumbrarás, que cambiarás de gente, que encontrarás otra rutina que en parte substituirá la anterior, pero no es verdad. La nueva rutina lo único que hace es camuflar su ausencia, te acostumbras a no compartir tu vida como antes, pero nunca dejas de echarlo de menos, nunca. Tengo comprobado que cada dos meses necesito verles, sino me dan los ataques de melancolía. Pero no siempre es posible. Desde hace un par de semanas estoy con un ataque de esos: les llamo más, les busco en el messenger, pienso más en lo que deben estar haciendo, miro las noticias de TVE internacional e intento que me de pistas sobre si hay cambios en sus respectivas realidades. Cada uno echa de menos a su manera.
Pues justo ayer recibí esto...
...junto con un itinerario de Vueling Ams-BCN / BCN-Ams.
Si las personas se miden por la calidad de sus amigos...tengo que ser estupenda! ;)
Esta canción va por vosotras. Un besazo a todas y hasta dentro de muy poquitos días!!!
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